dilluns, 25 de febrer del 2008

LA VIDA MEDICADA




En la sociedad actual nos encontramos con frecuencia con sujetos que no soportan el menor dolor, ni la idea de sacrificio o de la libra de carne a pagar. Nuestra sociedad basada en el discurso capitalista, desmiente la idea de castración y difunde la ilusión de que el sujeto tiene acceso al objeto sin mediación alguna.

Es así que vemos como el discurso capitalista aliado al discurso de la ciencia nos proporciona un número cada vez mayor de productos para remediar cualquier malestar . Se habla de la llegada de la “farmacología cosmética” que se aplica a malestares que no pueden ser considerados patológicos como la depresión postvacacional o la angustia del lunes por la mañana; es decir, para mejorar el humor de las personas consideradas normales. Hay fármacos que prometen un atajo a la felicidad, el eterno bienestar. Fantasía que el capitalismo promueve. Pero todo ésto ¿a costa de qué? ¿cómo queda reducida la subjetividad humana? Además, ello ha desencadenado un incremento del gasto farmacéutico en detrimento de otras necesidades del ciudadano.

Esta crítica razonable y necesaria, contrasta con otra realidad por la cual los fármacos han mejorado de forma sorprendente la vida de muchos pacientes permitiéndoles una calidad de vida que de otra manera sería impensable. Para lograrlo han sido necesarios largos períodos de investigación con una importante inversión humana y económica.

En esta disyuntiva, qué posición tomar. La crítica al consumo de fármacos, para cuya solución se requiere -entre otras medidas- de una mayor educación del consumidor y un control estatal del gasto, no nos puede hacer olvidar que muchos pacientes han podido superar graves enfermedades gracias a la farmacología.

Pero en el terreno que nos ocupa, el de la subjetividad humana, es importante aclarar que hay signos que no son disfunciones como por ejemplo la angustia o la inhibición frente a un peligro. También que el ser humano no puede prescindir de un cierto nivel de angustia en la lucha que la vida supone y que es básico que conserve la capacidad para dirigir su propia vida desde la autonomía y la libertad.

Esta mesa se propone abordar la problemática de la hipermedicalización de algunos malestares humanos, sin olvidar los beneficios que la farmacología ha aportado a muchos enfermos.


LA VIDA MEDICADA

Subjetividad y pensamiento contemporáneo.

Viernes, día 7 de Marzo, a las 20:00 horas.

Ateneu Barcelonès
Sala Sagarra, 4ª planta.
Carrer de la Canuda, 6.
Barcelona

Mesa redonda con la intervención de

JAUME AGUILAR, psiquiatra - psicoanalista.
ÁNGEL MARTÍNEZ, antropólogo.
JUAN PUNDIK, psicoanalista.

Presenta y modera:

CARMEN LAFUENTE, psiquiatra - psicoanalista.

ENTRADA LIBRE.

Información: ESPAI FREUD -Amigos de la Librería Xoroi-
Berlinès, 20.
08022 Barcelona
934185336
xoroi@xoroi.com

dissabte, 23 de febrer del 2008

EL HUMOR EN TIEMPOS DE GUERRA


Estamos en el tiempo de las “depresiones”. Según la OMS, 121 millones de personas la padecen. Los trastornos depresivos en la actualidad son responsables de la cuarta causa de muerte y discapacidad a escala mundial.
En este paisaje de “guerra” el chiste y el humor brillan por su ausencia. Cuando despuntan, ocupan un lugar secundario y desvalorizado como si de una frivolidad se tratara. Consideramos que hay que resituar el chiste y el humor para darles el lugar que les corresponde, ya que el humor nos obliga a reconsiderar y a relativizar algunos paradigmas actuales que cubren nuestra época con un manto de tristeza e introducir, asimismo, la dimensión de la falta y de la subjetividad en un mundo omnipotente y globalizado que desconoce a los sujetos en su dimensión singular e impone la “felicidad del consumo” para todos.
Es muy probable que el humor sea también un ejercicio de inteligencia que debamos sostener ante el empuje imparable hacia esa estupidez creciente que nos asola.


EL HUMOR EN TIEMPOS DE GUERRA
Desde el psicoanálisis, la sociología y el espectáculo.

ACTO INAUGURAL DEL ESPAI FREUD 2008 BCN
Subjetividad y pensamiento contemporáneo.

Día 29 de Febrero, viernes, a las 11:30 horas de la mañana.

Lugar: FPCEE - Blanquerna
Auditorio
Universitat Ramon Llull
Calle Císter, 34.
Barcelona

Mesa redonda con la intervención de

Daniela Aparicio, psicoanalista.
María Jesús Izquierdo, socióloga.
Godoy, actor humorista.

Presenta y modera:

Julieta Piastro, historiadora.

ENTRADA LIBRE

Información: Espai Freud -Amigos de la Librería Xoroi
Berlinès, 20.
08022 Barcelona
Tel.: 934185336
xoroi@xoroi.com


Esperando, que es gerundio, a Godoy, que soy yo, formamos una pareja de hecho para hacerles ver que en esta vida, como dijo Don Antonio Buero Vallejo, hay que esperar, esperar y esperar; es la única esperanza. Esperar a ser felices, tener dinero, casarnos, divorciarnos, morirnos, etc., etc., etc.; incluso etc. espera algún día dejar de ser etc.
Esperando a Godoy es un divertimento que reflexiona sobre la cultura, la contradicción, la estulticia, la mentira... caracterizado por un humor corrosivo, el sentido del absurdo y con el lenguaje como única herramienta, un espectáculo de humor para ver, escuchar y reír.
Mis queridos "esperadores", les deseo lo mejor, sigan esperando y que algún día les llegue algo, aunque sea de oferta.
Godoy


dissabte, 9 de febrer del 2008

Psicoanálisis y literatura





LAS OTRAS LECTURAS DE FREUD.

Carlos Rey

“Hay que llevar verdaderamente el caos
dentro de sí para poder engendrar una
estrella danzarina”
(Zarathustra)

Hay lecturas que dejan huella, como por ejemplo la lectura, análisis e interpretación por Sigmund Freud de Edipo de Sófocles. De los más de cuatrocientos términos y de los noventa conceptos estrictamente freudianos, es precisamente el complejo de Edipo el concepto central, el corazón del cuerpo teórico del método de investigación y análisis psicológico, por él creado. Concepto que mantuvo vigente de principio a fin, cuando ya no tenía abuela: “Creo que tengo derecho a pensar que si el psicoanálisis sólo tuviera en su activo más que el descubrimiento del complejo de Edipo reprimido, esto bastaría para ubicarlo entre las nuevas adquisiciones preciosas del género humano.”

Como suele ocurrir que una lectura remite a otras muchas lecturas, la segunda lectura capital para Freud fue Hamlet de Shakespeare. Así se lo escribe a su amigo y médico alemán Wihelm Fliess: “Una idea me ha cruzado por la mente, la de que el conflicto edípico puesto en escena en el Oedipus Rex de Sófocles podría estar también en el corazón de Hamlet. No creo en una intención consciente de Shakespeare, sino más bien que un acontecimiento real impulsó al poeta a escribir ese drama, y que su propio inconsciente le permitió comprender el inconsciente de su héroe.” Y como no hay dos sin tres, este tríptico lo completa la novela de Fedor Dostoievski, Los hermanos Karamazov. “Por lo que al escritor se refiere –dice Freud- no hay lugar a dudas, tiene su puesto poco detrás de Shakespeare. Los hermanos Karamazov es la novela más acabada que jamás se haya escrito.” Si en Edipo rey descubre lo universal del inconsciente disfrazado de destino, en Hamlet será la inhibición culpable y en Los hermanos Karamazv el deseo parricida.

La consecuencia de la presión que ejerce sobre el ser humano el complejo de Edipo sería una particular subjetividad trufada de tensiones y la necesidad de narrar, de relatar, de dotarse el humano de otra historia diferente de la real. Una diferente ascendencia, otra familia, unos padres distintos a los de la filiación, por ejemplo; y en general, la necesidad de ficcionar nuestra realidad para comprehenderla. Por nuestra cultura judeo-cristiana somos hijos de la parábola. (¿Los nuestros serán los hijos de la parabólica?). A ese relato como recurso para atenuar el peso de la prohibición del incesto, Freud lo llamó, curiosamente, La novela familiar del neurótico. ¿Qué relación existe entre éste tipo de narración oral y lo que se relata en la novela como género literario? De entrada se puede decir que comparten el mismo origen pero que toman distintos itinerarios para llegar a un mismo fin: la simbolización. El como si... imaginario, tanto en literatura como para el psicoanálisis, aspira a la representación metafórica. Una buena diferencia encontrada entre la novela como género literario y La novela... del psicoanálisis, es la que nos ofrece la escritora francesa Annie Ernaux. ”No deseo escribir ningún relato, pues eso significaría crear una realidad en lugar de buscarla.” Y otra gran diferencia, la que establece con la escritura plana, descriptiva, o conocida como literatura del yo. “Y tampoco quiero limitarme a reunir y a transcribir las imágenes que conservo en la memoria, sino tratarlas como documentos que se aclararán los unos a los otros al estudiarlos desde diferentes ángulos (Elaborar). Ser, en pocas palabras, etnóloga de mí misma”. Otros escritores como Cesar Antonio Molina, al escribir sus memorias nos aclara que son “memorias de ficción”. “Es la novela de mi memoria, porque para contar cosas de la propia vida hay que hacerlo desde la ficción.”

Para leer el artículo completo pulsar aquí

divendres, 1 de febrer del 2008

Motivado por el tan interesante espacio del Ateneo Barcelonés sobre escritura y psicoanálisis, acertadamente moderado por Manuel Baldiz, y vigorosamente participado por Inma Monsó, Isabel Nuñez y Dante Bertini, os invito a leer un interesante articulo de Joseph Knobel Freud, publicado en la desaparecida revista “TRES AL QUARTO, Nº 5” que ayudará, espero, a desembrutecer algunas relaciones sentimentales con la creatividad y su gesta.
Pretender ver el origen de la mudanza caleidoscópica de la vida, propia o ajena, solamente relacionada con madurar el dolor, sublimar el trauma o aceptar el vacío, conduciría a una ceguera injusta hacia el placer y su lugar, faro natural en el ser humano para navegar entre aguas más agitadas o benignas. Crear solo es posible porque hay vida y, eso, estimula … Os invito a leer mas en lo que sigue.

Antonio V.Cardoso




Infancia y Creatividad

Joseph Knobel Freud [psicólogo, psicoanalista]

El psicoanálisis se ha dedicado a investigar la infancia de grandes creadores y, en menor medida, a decir algo sobre el proceso creador en la infancia. Es posible, en parte, que esto sea así por las definiciones que se manejen sobre la creatividad; definiciones que traducen lo que en nuestro imaginario social se entiende por "creativo".
Tomemos por ejemplo una definición de Anzieu: "La creatividad se define como un conjunto de predisposiciones del carácter y del espíritu que pueden cultivarse y que si bien no se encuentran en todo el mundo, como tienden a hacerlo creer ciertas ideologías que durante cierto tiempo estuvieron de moda, sí por lo menos en muchos. En cambio, la creación consiste en inventar y componer una obra, artística o científica, que responda a dos criterios: aportar algo nuevo (producir algo que nunca haya sido hecho) y tarde o temprano ver reconocido su valor por un público. Definida de tal manera, la creación es rara." Supongo que es posible pensar las cosas de otra manera: toda obra aporta algo nuevo (a no ser que sea pura repetición, pero entonces no estaríamos hablando de creación) y desde que el niño nace tiene un público; gran parte de lo que observamos en la clínica tienen una explicación por las repercusiones que suscita en su público el obrar del niño.
Según una definición de diccionario, crear es hacer que empiece a existir una cosa. Desde este punto de vista, toda producción es creativa, sobretodo en la infancia; ya que, el hecho de que el mundo exista no quiere decir que el bebé no tenga que inventarlo, crearlo.
Para Vigotsky "existe creación no sólo allí donde se originan los acontecimientos históricos, sino también donde el ser humano imagina, combina, modifica y crea algo, por insignificante que esta novedad parezca al compararse con las realizaciones de los grandes genios."
Para Winnicott, a su vez "la creatividad es la conservación durante toda la vida de algo que en rigor pertenece a la experiencia infantil: la capacidad de crear el mundo"
Lo que me interesa destacar, con estas puntuaciones, es que el mundo que el niño crea ya está ahí, esperando, digamos, para ser creado; y siempre que en ese mundo haya alguien que le permita al niño existir: "la creatividad es el hacer que surge del ser"(Winnicott).
Un Otro que le presenta el mundo al bebé, pero que a la vez le permite hacerse la ilusión de estar creando el mundo; manteniendo de este modo un espacio transicional. Un espacio que le permite al bebé experimentar con su omnipotencia, descubrir su entorno, crear y vincular lo creado con lo real.
El proceso de estructuración de un sujeto puede entenderse como un camino que va desde este espacio de ilusión, que nunca va a perderse, hasta la "desilusión", y este camino es imposible/impensable de transitar sin la presencia de Otro, sobre todo al principio; por eso decimos que es un proceso que va de la dependencia a la independencia ("de la ilusión a la desilusión"). La historia de un bebé no se puede escribir en términos de él solamente, hay que pensarla en términos del ofrecimiento de un ambiente que satisface sus necesidades de dependencia o que, al contrario, no logra satisfacerlas.
De este modo, es el Otro, generalmente la madre, quien traduce o interpreta las necesidades del niño; en este permanente intercambio, una "madre suficientemente buena" dejará suficiente espacio como para que su bebé acepte su ausencia, pero no tanto como para que su ausencia se transforme en un verdadero agujero.
De este juego de ausencia y presencia, cuyas reglas y trampas están …

(para leer el articulo completo pulsar aquí )